El cliente
Una de las cosas subrayadas en el briefing inicial, era representar la identidad del usuario convertida en hogar. A partir de aquí trabajamos mano a mano con el cliente para reformar de manera integral este ático, situado en la Calle de Pàdua (Barcelona).
La ejecución.
Un estilo rústico con acabados finos y elegantes, es la mezcla perfecta que caracteriza a esta reforma. Accedemos al interior, y unas lamas verticales de madera nos separan sutilmente de la sala, sin perder la harmonía visual.
Al abrir todos los espacios de la primera planta, conseguimos la amplitud y luminosidad que deseábamos, pero la intervención que hace que el espacio se conciba como un todo, es la cuidadosa selección de materiales que se repiten en todas las estancias: Un pavimento continuo de microcemento, desde el interior al exterior de la casa, una madera de nogal como revestimiento principal, paredes de yeso visto, equipamientos en acabado negro mate y varios tejidos de fibras vegetales, como el mimbre, el sisal y la tela de saco. Un conjunto de texturas y materiales naturales que consiguen plasmar un lenguaje íntimo y cálido, integrando al mismo tiempo el concepto “Wabi-sabi”, un término estético japonés que habla de <<la belleza de la imperfección>>.
Como se suele decir, los pequeños detalles hacen la diferencia… Y es que en el proyecto de Pàdua, esos detalles crean los rincones más bonitos de la casa, y marcan el sello personal de quién la habita.
Tipología: Reforma integral de vivienda
Interiorismo: Cristina Domènech
Construcción: Global Projects.
Superfície: 125m2