Las reformas de viviendas en Barcelona y en el resto de España siguen evolucionando según las últimas tendencias y novedades del ámbito de la arquitectura, el diseño y el interiorismo. Además, se suma el alto nivel de obsolescencia del parque español de residencias, el cual hace más necesaria la renovación paulatina de las viviendas.
Según el último estudio realizado por Global Projects, el 70% de los inmuebles se reforman por estar en mal estado, mientras que el 30% restante se realizan por motivos estéticos, principalmente cambios de mobiliario y mejor aprovechamiento del espacio.
¿Quieres saber cuáles son las reformas de moda en las viviendas en España? Sigue leyendo y descúbrelas.
Los propietarios quieren hogares bonitos
Cuando un propietario reforma su vivienda, más allá de hacerla habitable, quiere que sea atractiva. Se busca la perfección en todo el proyecto de transformación integral, desde la estructura y la distribución, hasta los acabados, equipamientos y el mobiliario.
Durante el último año, las tendencias han virado hacia lo artesano: recuperación de techos altos con molduras, recuperación de detalles originales así como paredes de ladrillo visto, vigas antiguas, vuelta catalana, etc.
La tendencia nos lleva a buscar espacios diáfanos y ambientes cálidos y luminosos. Además, espacios como la cocina, integrados al salón, destacan por la mezcla entre lo vintage y lo moderno, los materiales personalizados, el cambio de mobiliario y los electrodomésticos integrados. Se recurre en muchas ocaciones al uso de arcos, revestimientos, molduras de escayola, muebles a medida, encimeras de cocinas hechas con gres de porcelánico, en ocasiones con el fregadero integrado, integración de electrodomésticos en el mobiliario, baños con griferías empotradas en la pared y sanitarios suspendidos.
La madera se ha convertido en el elemento principal, que se suele utilizar para sorprender. Fusionada con las líneas orgánicas de las viviendas, logra sumar segmentos y detalles únicos, que se convierten en una sola pieza. De esta forma, volvemos a un clásico que siempre se reinventa, esta vez, para reformar una vivienda y hacerla más moderna y atractiva.
Un cliente que sabe lo que quiere
En un contexto en el que hemos de tratar con un cliente hiper informado e hiper exigente, los constructores tenemos la obligación de dar mucho más. El cliente tiene en la cabeza el resultado final, sabe exactamente lo que quiere y cómo lo quiere, y está en nuestra mano hacerlo realidad. Quieren la perfección en todo el proyecto de reforma integral, desde la estructura y la distribución hasta los acabados. Y, desde luego, es posible conseguirlo.